La leche materna se puede almacenar si utilizas un extractor de leche, pero aprender a usarlo puede requerir de cierto tiempo y de dedicación. No es lo mismo que amamantar a tu bebé, pero acabarás logrando acostumbrarte.
Consejos para extraer leche materna para tus biberones
A continuación, te proponemos una serie de consejos con los que podrás preparar de manera más sencilla y cómoda la leche de tu pecho para rellenar los biberones:
– Mantén el control sobre los ciclos de extracción: la primera sesión con el extractor debe durar al menos unos 15 minutos. Si en las primeras sesiones no consigues mucha leche, no debes preocuparte, pues la succión regular con el extractor pronto hará que tus pechos empiecen a producir más leche. Está en tu mano ir probando para averiguar en qué momentos es más favorable el uso del extractor. Una vez que hayas detectado el mejor momento, te recomendamos que mantengas una rutina para que tu cuerpo se acostumbre al suministro extra de leche.
– Recuerda mantener la higiene: antes y después de cada extracción debes limpiarte bien las manos, y también limpiar bien todas las partes del extractor que estén en contacto con la leche o con la boca del bebé. Debes desinfectarlas tras la limpieza por lo menos una vez al día, y secar adecuadamente cada una las piezas antes de almacenarlas hasta el siguiente uso.
– Trata de estimular la eyección de leche: existen extractores eléctricos que utilizan una tecnología que trata de simular la forma en que se alimenta tu bebé, con el fin de ayudar a estimular la extracción de forma más natural. Pero también puedes darte un masaje en los pechos antes de la extracción y durante la misma para ayudar al flujo. Además, si cubres tus pechos con una compresa o toalla caliente antes de la extracción, también conseguirás aumentar la cantidad recogida.
Consejos para conservar la leche materna extraída
Una vez que tengas la leche, debes seguir las siguientes recomendaciones para almacenarla y conservarla:
– Si la leche que has extraído es para utilizar en la siguiente toma o dentro de las próximas 24 horas, puedes guardarla en el biberón dentro de la nevera. Si el depósito del extractor es un biberón en sí mismo, no necesitas hacer ningún trasvase. Lo único que deberás hacer cuando tu bebé tenga hambre es sacar el biberón de la nevera y calentarlo con un calentador de biberones.
– En el caso de que necesites conservar la leche durante periodos más largos, podrías guardarla en el congelador, pero no más de 3 meses. Deberías guardar la leche en bolsas esterilizadas y de cierre hermético, colocándoles además una etiqueta en la que indiques la fecha de la extracción.
– Si guardas la leche a temperaturas de al menos 20 grados bajo de cero de frío, podrías conservarla por unos seis meses. Cuando quieras utilizarla, debes sacarla del congelador unas horas antes, dejando que se descongele a temperatura ambiente. Luego, al pasarla al biberón, deberás calentarla para dársela a tu bebé.
Ahora que sabes cómo usar un extractor para la leche materna, aprovecha para ir guardando la que necesites para alimentar a tu bebé. Si quieres más información sobre los extractores de leches, baberos y otros productos, visita nuestra página web en Babyclean.
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